Lynn Johnson
(Versión en español en los comentarios)
Pensar à séria custa. E custa ainda mais quando tenho de admitir que a minha opinião pode não ser a [mais] correcta ou que lhe faltam dados para que seja adequada e justa. Já me custou mais o “perder a opinião”, mas tal, felizmente, vai diminuindo, quando é isso que faz sentido. Apesar de por vezes as vísceras se incomodarem quando ouço, vejo ou leio algumas coisas, tento aplicar a razão. Isto por ser mais p’ó emotivo. Talvez quem seja mais p’ó racional, poderia pensar que no corpo, além do córtex cerebral, também há baço, esófago, fígado, estômago, fémur, genitais, pulmões, tendão de Aquiles, “the famous one” coração, etc., etc.. Pensar à séria custa… afinal, é preciso fazê-lo com o corpo todo. Tenho para mim que haveria mais serenidade na apresentação das opiniões.
Pensar cuesta...
ResponderEliminarPensar en serio cuesta. Y cuesta más aún cuando tengo quee admitir que mi opinión puede no ser la [más] correcta o que le faltan datos para que sea adecuada y justa. Ya me fue más difícil “perder la opinión”, pero, felizmente, la dificultad va disminuyendo. Apesar de que a veces las vísceras se incomodan cuando oigo, veo o leo algunas cosas, intento aplicar la razón. Esto puede ser más para las emociones. Tal vez quien sea más racional, podría pensar que en el cuerpo, además del cortex cerebral, también está el bazo, el esófago, el hígado, el estomago, el fémur, los genitales, los pulmones, el tendón de Aquiles, “the famous one” corazón, etc., etc.. Pensar en serio cuesta… pues, es necesario hacerlo con todo el cuerpo. Me parece que habría más serenidad en la presentación de las opiniones si lo hiciésemos de esta manera.
Desconhecia por completo.
ResponderEliminarObrigado Paulo! :)
:) De nada J. ! :)
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